martes, 15 de noviembre de 2011

Cuento: "UN JOVEN” "Por: Lucrecia Olea.

           En las orillas, alejado de la ciudad, vivía un jovencito llamado Leonel, tenía 19 años de edad y una estatura de aproximadamente 1.70 m. Este muchacho era muy apasionado por el futbol, por eso, practicaba día por medio, le gustaba recostarse los días de tormenta para poder escuchar la lluvia, esa lluvia ruidosa que caia sobre su casa.
Como todos los días, luego de terminar la practica de fútbol,caminando por una calle abandonada, se encontró con una joven muy bella en el camino. El, muy entusiasmado mirándola, le dijo, mientras pasaba por su lado...
_Hola preciosa, ¿a dónde vas tan apurada?
_Perdón-dijo ella- pero no quiero hablar con personas desconocidas en mi recorrido del camino.
_Espera, no te vayas.
_¿Por qué  he de quedarme?
_Porque me gustaría saber tu nombre.
_Soy Celeste, ahora por favor si me disculpas tengo cosas que hacer.
_Si, si claro, disculpa perdoná por retrasarte.
Entonces ambos siguieron su camino. Esa  joven  dejó a Leonel muy pensativo;en fin, llego a su casa, se preparo una ducha bien caliente, luego de eso, se puso a comer algo.
Cuando llegó la hora de descansar, el joven se fue a dormir, se durmió y empezó a soñar.
Leonel se encontraba en una calle muy lejana de la ciudad, sin árboles ni casas. El, en su sueño, esperaba a esa joven tan bella que le había dicho que allí lo esperaría; pero, pasaban  segundos, minutos, horas, y ella no aparecía. El joven se encontraba un poco asustado, por estar en ese lugar, y para sí mismo, se preguntaba:
_"¿Por qué una chica me pediría que la espere en un lugar como éste?"
El joven seguía esperando y Celeste no aparecía, entonces decidió irse. Mientras caminaba hacia la ciudad, sintió un grito desde la inmensa oscuridad que lo asustó mucho. Leonel, se detuvo un instante y empezó a escuchar... Era un grito que lo llamaba. Algo se le acercaba con mayor rapidez. El no podía distinguir que era exactamente, mientras más se acercaba mayor eran sus latidos. Escuchó otro grito que le decía:
 _"Cierra tus ojos que si no la ves no te hara daño".
Entonces, el joven cerró los ojos y fue ahí, donde, con mucho susto se despertó. Muy rápidamente se levantó de su cama, se dirigió a la cocina y fue por un sorbo de agua. Leonel quedó muy asustado de su sueño; sentía como que le habian advertido algo.
Al día siguiente, mientras se levantaba, algo le llamó la atención, era una cadenita plateada colgada en su espaldar de la cama.
_"Cómo llegó esto acá?", dijo el joven. La tomó con sus manos y un escalofriante aire le pasó por su cara. Leonel no entendía nada, pero se preguntaba qué era lo que le estaba sucediendo.
Eran las 17:30 pm. y el joven salió a practicar fútbol en su camino volvió a encontrar a la joven y ella ni bien lo vio se detuvo y susurrándole al oído le dijo:
_"No Temas, te matará si lo haces".
Leonel, le dijo: _"¿Quién?, ¿quién me matará? ¿a quién no debo temerle?".
Luego de decirle esas palabras, la joven siguió caminando. El se apresuró y le dijo:
_"Esperá, Celeste!, respondeme lo que te pregunté?"
_"ya lo sabrás, sólo hazme caso, por favor".
El joven dio la vuelta y muy aturdido siguió su camino. A las 20:30 pm termino su practica de futbol y salió para su casa. Leonel estaba esperanzado de poder ver a la joven de nuevo y así poder preguntarle lo que no le había respondido nuevamente, pero no fue como pensaba, la chica no apareció esta vez.
23:50 se acostó a dormir. Muy pensativo, por su sueño, se durmió y empezó a soñar otra vez! Pero, esta vez no fue un sueño distito, fue el mismo sueño que soñó la noche anterior, con el grito de esa muchacha y esa cosa que se le acercaba muy rápidamente, empezó a correr con los ojos cerrados, porque recordó la advertencia. El no estaba seguro de adonde estaba yendo, pero un tibio aire lo empujó y tropezando con algo que se encontraba en el piso, cayó y empezó a rodar, como si estuviera en una bajada sin fin... por nada abría sus ojos...seguía rodando y rodando, hasta que algo lo detuvo,  algo como una piedra, entonces sí abrió sus ojos y vio a Celeste sentada con los ojos cerrados junto a él. Entonces el joven le dijo:
_"Celeste, sos vos o mis ojos me engañan"
ella abrió los ojos y le dijo:
_"Ayudame por favor, necesito que me ayudes".
_"¿Qué es lo que está sucediendo?¿qué es lo que está pasando?"-dijo él.
_"sólo tienes que prometerme que cuando me veas otra vez en el camino no me vas a dejar ir"-dijo ella.
_"No te dejare ir, pero decime qué es lo que te pasa?"comentó.
_"No, no puedo decirte ni una sola palabra, si llego a decirte algo soy castigada y nunca más me verás cruzar esa calle". Leonel tomó su mano y le dijo:
 _"PUEDES CONFIAR EN MI, te prometo que cueste lo que cueste no voy a dejar irte cuando
te vea otra vez en esa calle".
El joven despertó, pero  esta vez más pensativo. Iba a hacer lo que Celeste le pidió en el sueño, aunque no estaba seguro porque había sido un sueño, ¿o no? 08:00 am se levantó  a desayunar. 12:00 am almorzó. 14:00 pm durmió siesta. 17:00 pm se levantó para irse a practicar. 17:30  pm salió y en el camino pensaba en Celeste, si la volviera a ver qué haría? A metros de él venía ella, con la mirada hacia abajo, se veía muy diferente. Leonel le preguntó, tomando coraje:
_"¿Qué te pasa Celeste?, ¿Estás bien?"
Ella, con la cabeza le dijo que no. Algo no andaba bien. Ella empezó a caminar y entonces, él dijo:
_"¡No, espera, espera, no te vayas, podés confiar en mí y contarme lo que te pasa!
Celeste con una voz entre cortada le dice:
_"Tienes que ayudarme, no quiero seguir sola en ese camino".
_"¿Cuál,cuál camino?"_le pregunta.
_"Olvidalo no lo vas a entender "_le responde ella.
_"Celeste, mirame!,sabés, si tengo que ayudarte haciendo algo para que estés bien lo
voy a hacer!,¿estamos?!, porque en estos poquititos días, que te vengo viendo he soñado con
vos y no he dejado de pensar si tengo o no la oportunidad de volver a verte los dias siguientes.
Me pareces una buena y tierna persona. Aparte sos muy bonita y me gustás mucho, sólo decime en qué puedo ayudarte!"
Ella alzó su mirada y le dijo:
_"Sólo si me ayudás a cruzar ese camino estaré libre de todo mal".
El, que no entendía nada, igual tomó su teléfono y les mandó a sus compañeros de fútbol el siguiente mensaje:
"HOY NO ASISTIRE A LA PRÁCTICA PORQUE ALGO ME SURGIO EN EL CAMINO,NO ES NADA MALO, LOS VEO MAÑANA. SALUDOS
LEONEL".
Luego, tomóla mano de la joven y caminaron juntos, muy callados,por ese camino que Celeste quería tanto la compañía de él. Por la mitad de ese camino,una voz que el joven no oyó le habló a Celeste:
_"Celeste ¿te crees que con ese joven vas a deshacerte de mí?"
_"Dejame tranquila, por favor, ¡andate ya!-le dijo la joven.
_"¡Celeste! ¿qué te sucede?¿por qué gritas?"_le dijo él.
_"Decile que me deje en paz"_ dijo ella.
_"Te dejaré en paz si me das lo que me quitaste"_le dijo la voz a Celeste.
_"¿quién debe dejarte en paz?"_ confundido dijo Leonel.
_"La voz que me está hablando. Me dice que yo tengo algo que le pertenece"_exclamó ella.
_"¿qué voz?"_respondió él.
Y mientras ella gritaba llorando:"Dejame! dejame!", algo se aproximaba en el camino.Leonel vio su sueño en la realidad, y le dijo a Celeste: "si cierras tus ojos no te hará daño, sólo confía en mí". Celeste le dijo:"CONFIO EN VOS". Ambos cerraron los ojos, y algo escalofriante les rozó el cuerpo. Luego de un largo rato, abrieron sus ojos y todo a su alrededor era tan bello que Leonel se alegró y le robó un beso a Celeste.
Ella le dijo:"me has liberado, te lo agradezco, muchas gracias".
Entonces, el joven respondió:"¿de qué te he liberado?".
_"¡Has liberado mi espíritu, que estaba  atrapado en las oscuridades de la tierra!"-dijo y desapareció.
Leonel no tuvo fuerzas para resistir lo sucedido, y se desmayó. Horas después entro en sí y despertó en su cama. Su amigo lo había encontrado desmayado en la calle y rápidamente había llamado a sus padres; pero, él  seguía sin entender lo sucedido. Susto y alegría lo invadían, porque una muchacha tan bonita pudo salvarse con su ayuda. El no entendía nada, hasta que se le ocurrió buscar en Internet leyendas sobre esa calle. Mientras buscaba, le apareció un documental de una joven cuyo  nombre era Celeste, la habían asesinado por confusión, buscando en sus pertenencias una valiosa cadenita plateada. Había una foto de ella. Leonel reconoció su rostro y se dio cuenta de que era la joven que se pudo salvar a través de él esa joven tan bonita.

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